La madrugada del domingo 4 de mayo, la Policía de Investigaciones confirmó la detención de José Alejandro Medina Ladera en Venezuela, por el crimen de Ana María Pizarro.

El ciudadano venezolano es el principal sospechoso del asesinato y descuartizamiento de la chilena, con quien mantenía una relación sentimental.

Según antecedentes del caso, Medina fue la última persona que vio con vida a la víctima, y su detención ocurrió a las 23:40 en la ciudad de Carabobo.

La Brigada de Homicidios de La Serena, junto a Interpol y la policía venezolana, coordinó el procedimiento para ubicar al imputado.

Ernesto León, jefe regional de la PDI de Coquimbo, afirmó que Medina habría salido de Chile por un paso no habilitado, informó Meganoticias.

“Tenemos antecedentes de que estaba deambulando, se hizo un control (de identidad)”.

El fiscal regional (s), Eduardo Yáñez, confirmó que el detenido permanece en Venezuela, mientras la Fiscalía espera el informe oficial para pedir su extradición.

Además, Yáñez aseguró que solicitarán una audiencia pública donde se expondrán todos los antecedentes recabados hasta ahora.

“La investigación es reservada. No obstante, a fin de poder dejar tranquila a la comunidad, debo adelantar que una vez recibida la noticia, vamos a pedir la audiencia de extradición, esta audiencia es pública, ahí se van a conocer todos los antecedentes”.

Finalmente, el fiscal explicó que, aunque la Constitución venezolana prohíbe la extradición de nacionales, este asunto corresponde a las gestiones entre ambos Estados.

Cabe señalar que el artículo 69 de la Constitución venezolana prohíbe expresamente la extradición de sus ciudadanos.

Dicho artículo establece: “Venezuela reconoce y garantiza el derecho de asilo y refugio. Se prohíbe la extradición de venezolanos y venezolanas”.